Es una serie de piezas escultóricas realizadas en mármol por el artista italiano Leone Tommasi (1903-1965), inspiradas en la Sinfonía Pastoral de Beethoven.
Esta serie llegó a la Argentina en distintos años: en 1951 lo hicieron las que representaban el IV y V movimiento (2 estatuas), en 1952 el I y III (2 estatuas) y en 1953 el II (1 estatua). Fueron guardadas en depósito y restauradas en 1962. Dos de ellas se instalaron en la intersección de las calles Salvador María del Carril y Segurola y hoy se desconoce su paradero. Las tres piezas restantes fueron emplazadas en el Jardín Botánico el 3 de setiembre de 1975.
V TIEMPO Este grupo escultórico está expresado por dos figuras, un desnudo masculino y uno femenino, en actitud de agradecimiento a Dios por la providencial lluvia caída, que se demuestra en la sinfonía con un himno de reconocimiento. Leone Tommasi nació en Pietrasanta, Italia, lugar donde pasó la mayor parte de su vida y que, gracias a él, inició su florecimiento como centro de los grandes artistas del mármol. Ha sido llamada, por eso, la pequeña Atenas. Estudió primero en la Academia de Bellas Artes de Roma y la de Brera en Milán. Durante 20 años fue profesor en la Escuela de Arte Estático de Pietrasanta. A pesar de haberse dedicado extensamente a la escultura, fue un eximio pintor, considerado el más grande acuarelista de su época. Entre 1950 y 1954 viajó a la Argentina para realizar las grandes estatuas de contenido social que se colocaron en el frontispicio superior de la Fundación Eva Perón y las proyectadas estatuas que conformarían un colosal grupo escultórico, de más de 100 metros de altura, en homenaje al Descamisado. Tommasi era el escultor preferido de Evita y, aunque no terminó su obra, llegó a construir varias piezas que fueron descabezadas y arrojadas al riachuelo por los partidarios del golpe de Estado que derrocó al gobierno peronista en 1955. En 1996 el presidente Carlos Menem encargó la búsqueda de las estatuas en el fondo del río donde se encontraron tres que fueron trasladadas a la Quinta de San Vicente, hoy convertida en Museo.
Fuente: Jardín Botánico Carlos Thays