Se sancionó la ley que obligará a que los tanques de agua de los edificios se limpien al menos una vez por año, con controles y análisis periódicos para seguimiento; la ordenanza vigente hasta ahora exigía realizarla cada seis meses.
El Cuerpo Parlamentario de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sancionó, durante la sesión ordinaria del jueves 8 de noviembre de 2018, una ley que regula la limpieza y desinfección de tanques de agua destinada al consumo humano de los inmuebles sujetos al régimen de propiedad horizontal. El administrador como responsable de atender la conservación de las partes comunes incluirá en sus funciones, ocuparse que la limpieza de los tanques se realice.
Hasta ahora los edificios se regían por la Ordenanza N° 45.593 que establecía la obligatoriedad de realizarla de manera semestral. Pero el marco normativo hoy, tanto desde la Organización Mundial de la Salud -OMS- como desde el Ente Regulador de Agua y Saneamiento -ERAS- organismo tripartito, autárquico e interjurisdiccional, recomiendan hacerlo de forma anual.
La modificación a la periodicidad permitirá un uso más racional del agua y un ahorro sustancial de litros de agua en toda la Ciudad de Buenos Aires. La realización de un análisis bacteriológico y físico-químico de laboratorio a los seis meses de efectuada la citada limpieza y desinfección, permitirá conocer el estado del tanque de agua. Además deberá darse un seguimiento efectivo, asegurando así su conservación, sin necesidad de proceder a una limpieza innecesaria, según sea el caso.
La normativa aprobada establece sanciones al consorcio de propietarios y/o administrador que no realice la limpieza y desinfección de los tanques de agua cuando se detecte que la calidad del agua potable para consumo humano no se ajusta a los estándares establecidos. También se multará por falsear o alterar los datos de la documentación.
La iniciativa fue presentada a la Legislatura por el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, y despachada por las Comisiones de Legislación General y de Justicia. Se aprobó con 33 votos afirmativos, 16 negativos (UC, BP, AyL, PTS-FI, PS) y 5 abstenciones (MC y Evolución).
Los diputados de la oposición, Santiago Roberto (Bloque Peronista) y Hernán Arce (P. Socialista), sostuvieron que es una ley sensible para la salud de los vecinos y con el supuesto interés de reducir las expensas en 10 ó 15 pesos lo que en realidad hace es poner en riesgo a la población. También se argumentó que el problema del costo de las expensas no son los tanques de agua. «No sirven estas recetas mágicas, porque el pago de este mantenimiento es ínfimo», se aseguró. Además, se mencionó que «vivimos en una ciudad donde el ABL aumentará hasta un 38% el año que viene» y que «la limpieza semestral de un tanque de agua garantiza la inocuidad del agua para el consumo».