Cada año, el 15 de febrero, recordando la fecha en que se compra el terreno en el cual se instaló la Pulpería, se celebra el aniversario del barrio de Caballito que este año cumple 200 años y su bicentenario se celebrará con la plantación de 200 ejemplares nativos en sus parques y plazas. Además, para homenajear la historia y creación del barrio, retorna al barrio la veleta de la histórica pulpería a la cual el barrio debe su nombre. La veleta viaja desde el Museo de Luján para instalarse en el Museo Perlotti por todo un año. No dejes de leer la nota: también te contamos sobre los festejos previstos y sobre grabado que ilustra esta nota. #Caballito #VeletadelCaballito #PulperíadelCaballito #200Arboles #Comuna6 #MuseodeLuján #MuseoPerlotti #JuliánCGonzález
El 15 de febrero de 1821, Don Nicolás Vila, casado con doña Juana Agriente, compra a don Juan Antonio Avalos, la manzana comprendida por las actuales Av. Rivadavia y Emilio Mitre, en la que instaló una pulpería; en el palenque exterior, frente a una de las puertas de entrada, plantó el mástil de la embarcación, y en la perilla del mismo colocó una veleta de latón con la figura de un caballito de patas retaconas, que había comprado en la herrería de Monteagudo, en la calle Venezuela entre Perú y Bolívar. Fue a partir de entonces que los numerosos parroquianos que concurrían al negocio (particularmente los días domingo, en que don Nicolás vendía sus famosos raviolis (que preparaba con la acelga de su quinta), y también los transeúntes, comenzaron a utilizar la veleta como referencia geográfica: «antes del Caballito», «pasando el Caballito», «frente al Caballito», etc., institucionalizando el nombre que terminó por generalizarse a todo el vecindario. (fundamentos del proyecto de ley que dio origen a la ley que festeja el día del barrio cada 15 de febrero).
Este 15 de febrero, el corazón de la Ciudad cumple 200 años y la Comuna 6 realizará un trabajo en conjunto con APrA para marcar este hito con una masiva plantación de árboles nativos.
Los primeros ejemplares están destinados al Parque Centenario, uno de los parques más emblemáticos del barrio. A futuro, los árboles crecidos generarán un pequeño bosque urbano en el sector central del parque y sumarán una atracción más a este espacio que convoca visitantes de distintos barrios. El resto de los ejemplares se repartirán entre los XX espacios verdes acorde a las necesidades que presenten.
Para plantar cada uno de estos árboles se invitan a distintos vecinos caballitenses, incluyendo personalidades destacadas del barrio, comerciantes, autoridades y todos los que generan ese fuerte sentido de pertenencia e impronta barrial que caracterizan a Caballito.
Entre las características que destacan este barrio del resto de los 48 barrios porteños, es que Caballito se sitúa exactamente en el medio de la Ciudad. De hecho, la placa que marca el centro geográfico de la Ciudad se encuentra en la calle Avellaneda 1300.
Sin embargo, las transformaciones urbanísticas que atravesó Buenos Aires en los últimos años resultaron en el corrimiento de este punto. El aniversario barrial también incluye el reemplazo de esta placa por otra en el nuevo punto recalculado con las dimensiones actuales de la ciudad, en Martín de Gainza 635.
Además, para homenajear la historia y creación del barrio, retorna al barrio la veleta de la histórica pulpería a la cual el barrio debe su nombre. La veleta viaja desde el Museo de Luján para instalarse en el Museo Perlotti por todo un año.
El barrio se fue consolidando como polo gastronómico y cada vez son más los vecinos que eligen salir a comer por los alrededores.
Festejos
Para seguir incentivando el crecimiento de estos comercios, del 10 al 15 de febrero se realizará una feria gastronómica virtual en conjunto con Buenos Aires Capital Gastronómica.
Los distintos comercios barriales ofrecerán una variedad de ofertas, promociones y menús especiales en los distintos formatos presencial, delivery y take away.
También acompañarán los festejos el mercado gourmet de Buenos Aires Market y los productores orgánicos de Sabe la Tierra con ferias en Parque Rivadavia y Parque Centenario.
El bicentenario también estará marcado por otras actividades que combinan lo virtual y lo presencial acorde a los protocolos sanitarios correspondientes.
La participación de los vecinos es un concepto que atraviesa todas las propuestas, comenzando con la creación del logo del bicentenario mediante un concurso abierto.
Por otra parte, se lanzó una votación a través de las redes sociales de la Comuna 6 para elegir el diseño de un futuro mural en el Parque Rivadavia, otro clásico barrial. Incluso gran parte de las actividades fueron propuestas y organizadas por un conjunto de vecinos con el apoyo gubernamental para la coordinación y difusión de las mimas. Este itinerario incluye actividades deportivas, recreativas y artísticas en el espacio público o de manera remota.
Imagen que ilustra esta nota: Grabado – Pulpería del Caballito de Julián C. González
El Museo Nacional del Grabado posee una amplia colección de grabados que muestran la ciudad de Buenos Aires. Estas imágenes son, qué duda cabe, interesantes documentos arquitectónicos que muestran cómo ha ido cambiando nuestra ciudad.
Este grabado se titula Pulpería del Caballito y es de Julián C. González. A continuación, un fragmento del texto que escribió su nieta Inés Lalanne, que forma parte del libro Julián C. González, grabador y pintor: crónica de una ciudad en imágenes.
«El barrio debe su nombre a la pulpería que en 1804 instaló don Nicolás Vila en la esquina de las actuales calles Rivadavia y Emilio Mitre, y que era reconocida por su típica veleta en forma de caballito. Como todos los barrios del oeste, también éste progresó en forma notable con la llegada del ferrocarril, que desde 1857 atravesó el barrio adoptando el nombre de la famosa pulpería para su estación en el lugar.
Zona de lujosas quintas, a lo largo de la actual avenida Rivadavia, era para los porteños un lugar de fin de semana. Precisamente de una de sus quintas, la de Ambrosio Plácido Lezica, nace en 1928 el Parque Rivadavia. El tranvía y más tarde el subterráneo contribuirán al desarrollo de este barrio, hoy en día uno de los más residenciales de Buenos Aires, y en cuyo interior se encuentra localizado el centro geográfico de la ciudad. En la plaza Primera Junta, una réplica de la tradicional veleta del caballito, nos retrotrae a aquellos tiempos en que el barrio era el descanso obligado antes de ingresar a Buenos Aires.
González nos presenta una estampa exquisita, acotando que la calle en que se encontraba la pulpería era la Calle del Polvorín. Éste es otro caso en que la casa está vista desde abajo, por lo cual a pesar de ser una construcción de una planta, toma relevancia. Creo que el artista se valió de este medio y de una perspectiva algo exagerada para poner en valor la casona que diera nombre al barrio.
Alineado con el tercio de la composición, se eleva la veleta del caballito, detalle imperdible. Casi al medio de la obra, la gran puerta de entrada a la pulpería, destacada por el mayor contraste que se da entre el umbral blanco y el oscuro total de interior que deja entrever la puerta abierta.
Las medias tintas borrosas del cielo con nubes que se desplazan en diagonales ascendentes ponen distancia con la casa, que en un juego de luz y sombra destaca su esquina sin ochava abundando en detalles sutiles de ladrillos y enrejados. En esta obra el recorrido visual nos lleva como por una suave elipse al umbral iluminado y a la cortina que hábilmente se adivina apenas levantada como para invitarnos a entrar en la pulpería. Es sutil, pero puede apreciarse que el oscuro intenso de la parte inferior de la mencionada cortina es lo que se devela para permitirnos adentrarnos e imaginar las mil historias que allí sucedieron».
