
El sitio La Noria es el único lugar en la Ciudad donde se han descubierto restos de vida prehispánica. El último viernes del mes podés asistir a un recorrido que propone descubrir los remanentes o vestigios del paisaje nativo para transportarte en el tiempo y entender el contexto en el que se produjeron los hallazgos y la manera en que vivieron los primeros habitantes de Buenos Aires.
A cargo de Eva Bernat y Horacio Padula.
Viernes 27 de junio | 11 h.
Duración: 2 h
Cupo: 40 personas.
Av. General Paz 17122
Se suspende por lluvia.
Inscripción desde este enlace
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSfz-DkuNlk7NJKzcJmJ52dxty1DoK9KNoBypU8swJXTS14pYg/viewform
El Sitio La Noria, es el único lugar de la Ciudad donde se han encontrado restos de vida prehispánica.
Durante el año 1926, el investigador Carlos Rusconi señaló el área del sitio constituido por cerca de 12 km de bañados, juncales, totorales, lagunas temporarias y permanentes.
A partir de ésta y otras investigaciones previas, el equipo de arqueólogos y arqueólogas dirigido por el Dr. Ulises Camino, planteó la factibilidad de encontrar restos de las poblaciones prehispánicas que ocuparon el otrora Partido de San José de Flores.
En el año 2010 se pudo determinar un área posible de ubicación de los paraderos indicados por Rusconi. A finales de 2012 se comenzó a explorar el Parque Ribera Sur y se creó un mapa que permitiera decidir en qué lugares realizar sondeos.
En el año 2014, previo a la firma de un convenio con la Universidad del País Vasco, se realizaron sondeos de excavación en los que se detectaron restos cerámicos de indudable producción prehispánica, a unos 55 cm de profundidad.
Desde ese año hasta 2018 se hicieron cuatro campañas de excavación sucesivas de grandes magnitudes, que dieron como resultado la identificación del Sitio La Noria.
La investigación permitió establecer las ocupaciones entre los siglos XII al XV y una gran cantidad de información sobre cómo vivían los pueblos que habitaban el área. Eran recolectores y cazadores pero no pescaban, trabajaban la piedra, fabricaban cerámica y montaban campamentos con postes que se identificaron por las marcas en el suelo. Es probable que se vistieran con cueros, porque se encontraron piedras cuarcíticas que se usan para raspar o limpiar los cueros. También que cosieran con tendones de ñandú, un material fuerte y resistente y también se hallaron elementos ornamentales como cuentas.
Más información en esta nota publicada el 15 agosto 2018 en La Nación, el enlace ya no existe pero fue resguardado en el sitio del Centro de Arqueología Urbana de la Facultad de Arquitectura Diseño y Urbanismo de Buenos Aires: «En Villa Riachuelo, procuran resguardar restos arqueológicos prehispánicos» click aquí para leer la nota
Otra nota interesante se puede leer en la Revista Cerámica, titulada SITIO LA NORIA, Arqueología y Memoria Querandí que se puede leer en este enlace