El 12 de agosto de 1806, se conmemora el Día de la Reconquista de Buenos Aires, momento en que Liniers consigue hacer retroceder a los ingleses que habían ingresado por las actuales calles San Martín y Reconquista hasta que se repliegan sobre la Recova y el fuerte, hasta que Beresford decide capitular. Luego Liniers se encargaría de reorganizar la ciudad para afrontar el contraataque inglés. #Reconquista #Liniers #Beresford
En Buenos Aires la crisis de la monarquía aparece dos años antes que en el resto del imperio, cuando la invasión napoleónica pone en discusión la retroversión de la ciudadanía y la formación de juntas.
La presencia de barcos de bandera inglesa en las aguas del Atlántico Sur causa alarma. La rápida conquista del Cabo de Buena Esperanza lleva a las tropas inglesas a pensar en atacar a Buenos Aires, que se encontraba desguarnecida, con el fin de acceder a los mercados de la región frente al bloqueo continental, impuesto por Napoleón, que sufrían los productos manufacturados ingleses.
El 25 de junio, 1.600 soldados de la infantería británica desembarcan en Quilmes, al mando del Gral. Beresford. El virrey Sobremonte movilizó a las milicias e intentó detener el avance, pero fue derrotado. Al día siguiente se enfrentan en el Puente de Gálvez con el Regimiento 71 y las tropas son dispersadas, aunque logran destruir el puente para que no sea utilizado por los soldados enemigos.
Ante estas noticias el virrey Sobremonte emprende la retirada a Córdoba y se refugia en Luján, llevando consigo los caudales reales.
El 27 de junio las tropas inglesas llegan a la ciudad y el 28 de junio la bandera británica es izada en el fuerte y asume como gobernador el Brigadier General Beresford, quien intenta ganar el apoyo de los sectores más poderosos de la ciudad. La instalación del libre comercio provoca la reacción de los comerciantes de la ciudad y el Cabildo.
Mientras desde Córdoba el virrey Sobremonte intenta organizar un ejército, en Buenos Aires varios grupos organizan la resistencia. Juan Martín de Pueyrredón reúne a 1.000 paisanos y es sorprendido en Perdriel por las tropas inglesas, obligándolos a dispersarse. En Montevideo el gobernador Ruiz Huidobro colabora con el capitán de fragata Santiago de Liniers, quien reúne 1.000 hombres y desembarcan el 4 de agosto en el puerto de Las Conchas.
La ciudad sufre las tradicionales sudestadas y en estas circunstancias se produce el avance de estas tropas en la ciudad. Acampan en la quinta de Pueyrredón en San Isidro para capear al temporal, pasan por la Chacarita y acampan nuevamente en los corrales de Miserere. Al paso de estos hombres se suman nuevos voluntarios sumando 4.000 hombres en total. El 10 de agosto ocupan Retiro y al día siguiente avanzan sobre la Plaza Mayor.
El 12 de agosto inician el ataque entrando por la actual calle Reconquista que por entonces era conocida como de la Merced y la calle San Martín llamada de la Catedral. Liniers logra rodear a los ingleses quienes se repliegan sobre la Recova y el fuerte. Juan Martín de Pueyrredón toma la bandera del Regimiento 71, al verse rodeado Beresford decide capitular.
El 14 de agosto se lleva a cabo un Cabildo Abierto y solicita al virrey que designe a Santiago de Liniers Capitán General.
El 28 de agosto el virrey Sobremonte delega en la Audiencia la resolución de los asuntos urgentes y en Santiago de Liniers el comando de las tropas. El virrey se dirige a Montevideo y su autoridad sufrió un duro golpe por su comportamiento en la primera invasión, que como consecuencia trajo aparejado en la ciudad el surgimiento de un nuevo grupo de poder que eran los jefes de las milicias.